EL ALACRAN



Un maestro oriental que vio cómo un alacrán se estaba ahogando, decidió sacarlo del agua, pero cuando lo hizo, el alacrán lo picó. Por la reacción al dolor, el maestro sacudió rápidamente su mano y lo soltó, y el animal cayó al agua y de nuevo estaba ahogándose. El maestro intentó sacarlo otra vez, y otra vez el alacrán lo picó. Alguien que había observado todo, se acercó al maestro y le dijo:

"Perdone, ¡pero usted es terco! ¿No entiende que cada vez que intente sacarlo del agua lo picará?".

El maestro respondió:

"La naturaleza del alacrán es picar, y eso no va a cambiar la mía, que es ayudar".

Y entonces, ayudándose de una hoja, el maestro sacó al animalito del agua y le salvó la vida.

Reflexión:

No cambies tu naturaleza si alguien te hace daño, sólo toma precauciones. Algunos persiguen la felicidad; otros la crean. Tenlo presente siempre.

“No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres.

No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.

Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza.

No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal”. Rm. 12:17 -21


Autor de la reflexión: Mario Gutierrez

EL PODER DE UNA VISION



Alguna vez tuve un trabajo de ventas. Mi jefe era una persona que había entrado en el mismo puesto que yo, pero que en pocos meses había logrado ser supervisor de ventas. A otros supervisores les había llevado el triple de tiempo.

Siempre me ha gustado preguntarle a las personas exitosas porque ellas si triunfan y otras no.

Cuando se lo pregunté, me respondió: "Edgar, yo tengo la visión de que en un año voy a ser director de ventas. Pienso que la diferencia entre otros y yo, es que yo si tengo visión y otros no. Por eso, cuando las cosas empiezan a ir mal para ellos, como no tienen visión, piensan que no son buenos para las ventas y renuncian. A mí no siempre me va bien. Es por eso que la visión me ayuda a seguir adelante, a pesar de las dificultades temporales que tenga".

Debo reconocer, que esa respuesta me ayudó a comprender el poder de una visión, mejor que otra explicación que haya recibido antes.

En efecto, la única diferencia entre lograr tus sueños o no, es tu visión. Todos pasamos por dificultades en el camino hacia nuestros sueños y cuando no tenemos en nuestra visión el qué, el cómo y el cuándo, esas dificultades hacen que renunciemos. 

Yo añadiría algo más: utiliza tu imaginación para superar los obstáculos que se te presenten.

Se dice que un violinista daba un concierto, pero de repente, una de sus cuerdas se rompió. Enmudeció la audiencia ¿Qué haría ese hombre con la cuerda rota en pleno concierto? Con el mayor aplomo del mundo, dejó su violín en el suelo, caminó hacia uno de sus acompañantes y le pidió su violín. Acabó la pieza tocando ese violín. 

El público se le entregó.

Cuando le preguntaron cómo es que reaccionó de esa manera, el respondió: "Imaginé todas las contingencias a las que me pudiera enfrentar durante un concierto. Y ya había pensado que hacer en cada una de ellas, incluyendo qué hacer si se me rompía una cuerda".

Es la misma recomendación que te doy: piensa en todos los posibles tropiezos que te puedan suceder. Así, cuando te sucedan, sabrás como reaccionar.

También, tu visión tiene que tener un corazón verdadero. Una visión solitaria en la que solo estén incluidas tus comodidades personales, es construir una casa sobre la arena.

En tu visión tienes que incluir el bienestar de otros. De tu familia. Del mundo. Solo así, te sentirás más motivado en el camino hacia tu visión

¿Cuál es tu visión?

“Donde no hay visión, el pueblo se extravía”. Pro. 29:18 

Autor: desconocido