UN GRAN PODER CONLLEVA UNA GRAN RESPONSABILIDAD

La frase “Un gran poder, conlleva una gran responsabilidad” apareció en la primera historieta de Spider-Man, (Nº 15 de Amazing Fantasy 10 de agosto de 1963, por Stan Lee y Steve Ditko) y la cual se repetiría en varias historias de este personaje a lo largo de varias décadas, incluyéndola en la película estrenada en el año 2002 que fue de la aceptación de muchos.

Reflexionando sobre esta famosa frase recordé que en la Biblia existe una impresionante promesa de poder y está escrita en el libro de Hechos de los Apóstoles cap.1 ver 8 dice: “…recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo…”.

¿Qué significado tiene esto? ¿A qué tipo de poder se refiere la escritura?

El poder al que la Biblia hace referencia, es el mismo Poder de Dios canalizado. Es el poder que trasforma vidas, que da la paz, que entrega sanidad, es aquel que es capaz de hacer todas las cosas nuevas, incluso resucitar muertos. Es el mismo poder de Dios manifestado en Cristo Jesús.

De igual manera que en la película, el Hombre Araña ha recibido un “poder” (habilidades especiales) que utiliza para ayudar a hacer justicia y defender a los débiles, así también nosotros, todos aquellos que recibimos al Espíritu Santo de Dios, somos investidos con el poder de Dios, no solo para llevar un mensaje de fe y salvación, sino que además, para poner en acción el reino de Dios con los débiles y necesitados. “Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder” . 1Co 4:20

Recibir un poder como este, trae consigo gran responsabilidad para la persona que lo recibe, porque en sus manos ha sido depositado el poder para hacer cambios en las vidas de las personas, tal como Dios lo ha destinado, pero si se tiene “guardado”, es un verdadero desperdicio. Muchos temen en usarlo y no saben cómo ponerlo en acción.

Dice la Biblia: “Porque no nos ha dado Dios un espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”. 2Ti 1:7 Entonces: ¿Por qué dejarnos dominar por el temor y la duda?

Debemos aprender a poner en práctica ese poder para ejercer la misión de todo cristiano. “Si alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre conforme al poder que Dios da, para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén.” 1Pe 4:11

No olvides, si has aceptado a Jesús y has recibido a su Espíritu Santo, se responsable, utiliza el poder que Dios derrama en ti, pero utilízalo responsablemente, sin engaños, sin usura y sin vanagloria.

Recuerda UN GRAN PODER, CONLLEVA UNA GRAN RESPONSABILIDAD.

Autor: Mario Gutierrez